En un hospital de Corinto permanece una excombatiente de las Farc, que denunció haber sido víctimas de torturas y abuso sexual el pasado domingo 14 de julio en este municipio del norte del Cauca.
Dos hombres la raptaron y sometieron en una vivienda. Aunque la acusaron de ser informante, en colectivos de derechos humanos piden clarificar el ataque que se asociación con crímenes de desmovilizados en la región y que son atribuidos a bandas criminales y paramilitares como ‘Águilas Negras’ y ‘Clan del Golfo’.
Según reportes desde la localidad caucana, la mujer narró que el ataque ocurrió cuando ella estaba realizando unas compras en una tienda cerca de su casa en donde dos hombres que se movilizaban en motocicleta, la raptaron para conducirla hasta una vivienda en la vereda Huasanó, municipio de Caloto.
“Ella narró lo que sucedió porque logró ver hasta qué punto la condujeron y que luego fue interrogada violentamente por dos hombres, quienes la señalaron como informante de la fuerza pública, durante esto, uno de ellos la accedió sexualmente en dos ocasiones, tras herirla con un bisturí. Después de esto, permaneció en la vivienda en contra de su voluntad”, explicaron policías de la Sijín que atendieron el caso.
La mujer, gracias a un descuido de los raptores, cuatro días después del rapto logró huir de la residencia, presentándose en las instalaciones de la Casa de Justicia de Corinto donde fue auxiliada y trasladada a un centro médico.
“De inmediato, diferentes entidades, como la Comisaría de familia y la Secretaría de Gobierno, brindaron ayuda a la mujer de 35 años porque presentaba una herida en el pecho y cuadro de conmoción nervioso agudo”, explicaron funcionarios de la alcaldía de Corinto.
Los médicos que la atendieron señalaron que la mujer presentaba síntomas de agresiones físicas, hematomas, y abuso sexual, así como una herida abierta en el pecho.
La desmovilizada en estos momentos se encuentra bajo protección de la Policía.
FUENTE: NOTICIAS FLORENCIA
