La concesionaria Nuevo Cauca espera que 2020 sea el año en que inicie el proceso de construcción de la segunda calzada del corredor vial Popayán-Santander de Quilichao.
Sus representantes, entre ellos el empresario Carlos Alberto Solarte, prevén que este próximo año también culmine la gestión predial.
Esta fase, llamada de preconstrucción, se desarrolla desde finales de 2018, con apoyo de la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI).
Lea también: Nuevo Cauca cierra un año de éxito en gestión predial
“Gracias al esfuerzo de los encargados de esta parte del proyecto, hemos logrado un avance importante en garantizar las áreas que necesita la segunda calzada”, dijo Solarte.
El proceso de construcción implica casi 78 kilómetros de carretera, para convertir esa vía en un tramo de cuarta generación (4G).
Su ejecución, de acuerdo con Solarte, contribuirá a seguir modernizando la conectividad terrestre de Colombia.
Además, insistió en que estos avances en las carreteras también tendrán un impacto positivo en la economía nacional, debido al fortalecimiento del comercio exterior.
“Estamos hablando de que la exportación hacia Ecuador, por ejemplo, será beneficiada con mejores vías y menor tiempo de viaje”.
Eso implica una mayor capacidad desde el lado colombiano de transportar productos y, por supuesto, una mayor oportunidad para las industrias del país.
Se mantienen las operaciones en la actual calzada, previo al proceso de construcción
Paralelo a todas las fases que cumple Nuevo Cauca para llevar a cabo el proyecto, la compañía también mantiene la operatividad en el tramo actual.
Estas operaciones consisten en mantener la vía en buen estado, ofrecer servicios a los conductores y garantizar la seguridad.
La oferta actual es el servicio de emergencia de 24 horas para casos de accidentes en la calzada.
También está disponible la asistencia para momentos de falla mecánica o traslado en grúa cuando la avería no tenga reparación a corto plazo.
